En una esquina el Dr. Martin Luther King, pastor
religioso devenido en líder sin aspiraciones políticas, su único norte es la
lucha por la reivindicación de los derechos civiles de la vapuleada comunidad
afroamericana estadounidense, el lugar de la batalla: Selma, Alabama, localidad
ubicada al sur de los estados unidos donde se encuentra uno de los mayores
focos de odio racial de esa nación a mediados de los 60’s. En la otra esquina
el gobernador George Wallance quien más
por conveniencia política se pliega al ala más radical de los herederos del “disuelto”
esclavismo sureño.
Martin Luther King se dispone a
dar la batalla por el voto igualitario entre negros y blancos para ello prepara
una gran movilización pacífica que se desplazara desde Selma a Montgomery, en
los días previos a ese gran suceso la psicopatía blanca reacciona sin piedad
alguna, con asesinatos a sangre fría sin tomar en cuenta niños, mujeres o
ancianos, mientras en el medio el presidente Lyndon B. Johnson se debate entre las
conveniencias políticas o hacer lo correcto.
Los amantes de la segregación racial saben que la
tienen perdida, es por eso que dentro de su patética ignorancia reaccionan llevándose
todo lo que este por el medio antes de que el festín termine, su incomprensible
ira no es más que un reflejo del odio que se tienen a sí mismos y una vía para
en vano tratar de culpar a otros del miserable destino que les ha tocado vivir
y el cual por sus propios medios son incapaces de modificar.
Es por eso que Luther King ha
ganado esta batalla antes de haber empezado, a diferencia de los
segregacionistas, el si tiene bien claro sus ideales y el camino que debe transitar,
impregnado de una ética pocas veces vista en la historia de la humanidad el Dr.
King dejara una huella imborrable en la historia de la potencia militar más grande que se halla conocido y desnudara hasta ese
momento su desconocido lado oscuro.
De las cintas biográficas nominadas
en el 2015 a Mejor Película, Selma se distancia bien de ellas, no se posiciona
en los rigores clásicos del género como si lo hacen las otras, no evoca a algo cinematográficamente
previamente presentado y se crece en su sincero y descarnado aproximamiento a
la verdad.
VALORACIÓN 8.5 / 10
No hay comentarios.:
Publicar un comentario