miércoles, 31 de diciembre de 2014

FOXCATCHER De Bennett Miller



Bennett Miller el mismo que nos trajo Capote y Moneyball, ambas nominadas al Oscar como Mejor Película, nos deslumbra ahora en lo que a mi respecta con su mejor realización, Foxcatcher es una película impecable, excelentemente dirigida y con una de las mejores actuaciones que he visto de parte de todo un elenco. Miller trae este drama basado en hechos reales y que cuenta el descenso de John Du Pont heredero de una de las fortunas más grandes del planeta tierra, el clan Du Pont se hizo enormemente rico gracias a sus corporaciones de fabricación de productos químicos, John Du Pont no tuvo nada que ver con el trabajo de sus ancestros simplemente tuvo la suerte de haber nacido en el seno de esa privilegiada familia, John Du Pont no conoce lo que es trabajar ocho horas diarias para poder ganarse el sustento, no ha creado ni edificado nada fruto de su exclusivo sudor, lo que hizo fue donar y entregar altas sumas de dinero para proyectos cuyo fin era satisfacer su golpeado ego y ocultar sus terribles complejos de inferioridad con el agregado de tener un cuadro psicopático que en cualquier momento iba a estallar con consecuencias nefastas.    

Steve Carell mas conocido por su trayectoria como comediante sorprende en este gran rol dramático, su encarnación del excentrico y misterioso Du Pont es una de las mejores del año ayudado en parte por un excelente maquillaje con el cual casi luce irreconocible, Carell desde la primera escena en donde aparece nos trasmite con solo su rostro todo lo que su caracter debe incrustarnos: rareza, temor, risas pero sobre todo asombro, el conflicto interno de Du Pont no se lo deseo a nadie, su inclinación en hacer el ridículo dado por su baja autoestima no tiene limites, el patrioterismo excesivo y ciego, su empeño en filmarse para autoglorificarse y su obsesión con las armas y la lucha libre que es el motor principal de los lamentables sucesos de la cinta nos describen a esa parte de Estados Unidos casada con la mas irracional violencia y al mismo tiempo con valores moralistas y religiosos terriblemente deformados y que se convierten en objetos de dominación.   





En su cruzada egocentrista Du Pont se empeña en patrocinar el solo a todo un equipo de luchadores olímpicos, instala en sus avasallantes terrenos un soberbio gimnasio para que entrenen y logra contratar al medallista olímpico Mark Schultz en la piel de Channing  Tatum, el ex hombre mas sexy del mundo demuestra que es un actor completo, Tatum quien también aparece con un maquillaje que deforma su adorado rostro por el cual suspiran muchas féminas logra un registro muy alto, su metamorfosis se completa en su postura y forma de caminar algo que también logra a la perfección Mark Ruffalo como su hermano-mentor David,  también medallista olímpico, es impactante ver como ambos a través de su performance netamente físico logran develar la anatomía típica de los luchadores, el trió Carell-Tatum-Ruffalo es solido como una roca y no dejan que apartemos la vista de ellos, seria un crimen si en los diferentes premios por venir no se reconociera el trabajo de alguno de ellos.

Bennett Miller se asegura desde los inicios del metraje el tono oscuro, tétrico e intimidante que definirá toda la propuesta acompañada de una música alarmante, depresiva y que nos da indicios de que algo muy malo viene ya que lo mas notable del film es la constante tensión y el suspenso que subyace en un aparente ambiente de calma, entre tanto Mark aunque comparta mucho de los ideales basuras de Du Pont se va dando cuenta del desequilibrio mental de su nuevo protector y de sus ocultas motivaciones homosexuales reprimidas, finalmente su hermano David logra ser persuadido por el multimillonario sin este saber que los demonios de Du Pont germinaran con mas fuerza y harán su brote catastrófico en el momento menos esperado. 


VALORACION: 10 / 10


martes, 30 de diciembre de 2014

ESPEJOS De Cesar Manzano



Espejos prometía mucho en sus intrigantes avances en las salas de cine, la opera prima de Carlos Manzano una vez llegada a las salas de todo el pais genera opiniones encontradas, lo que si es cierto es que la obra es un gran avance en lo técnico y esta muy bien cuidada a nivel de la imagen pero no nos extraña que tenga costuras en el guion y en algunas interpretaciones de sus actores, ya he mencionado en otras oportunidades que el cine Venezolano presenta graves fallas en estos apartados dejando a un lado una que otra honrosa excepcion. Como ya es mi costumbre al tratarse del cine de mi país hare una critica constructiva y con el atrevimiento de siempre al entrar en lo didáctico ayudado por mis modestos conocimientos, en pos del avance y posicionamiento de nuestras producciones a nivel internacional. Se apaluden los logros esporádicos en materia de festivales, pero la meta debe ser el crecimiento de la industria cinematográfica vista como un todo.

Antes de entrar en materia debo decir que el cine Venezolano ha sufrido subidas y bajones, en los 70’s se dio un gran boom similar al que vivimos actualmente pero con la diferencia que en aquel entonces técnicamente las propuestas dejaban mucho que desear, actualmente gracias a dios ya no tenemos ese problema o ha disminuido considerablemente, luego del famoso viernes negro de los 80’s poco a poco las producciones comenzaron a disminuir, ya a mediados de la década ver un estreno nacional en cartelera era algo no común, lo peor vino en los 90’s, el cine se fue prácticamente a cero, es en la mitad del nuevo milenio donde gracias a la iniciativa del gobierno de turno nuevamente las producciones venezolanas emergieron.
La práctica hace al maestro, para tener un cine de alto nivel este se debe dar de manera ininterrumpida, lamentablemente esto no ha sucedido en nuestro país y si hablamos de la formación masiva de los profesionales en esta área la cosa se pone peor, lo que si ha seguido de manera incesante son las telenovelas de mal gusto, los sábados sensacionales y pare de contar, con esto hemos crecido, esta insertado en el inconsciente ya que directa o indirectamente hemos estado en contacto con ese tipo de “cultura”, es lógico que al llegar al cine algo de ello lo traslademos a la gran pantalla en perjuicio de la obra, tenemos que exorcizarnos esos demonios, no estoy diciendo que las novelas terminen, tienen su publico y siempre estarán allí, pero es de suma importancia que entendamos que el cine es otro medio, es muy diferente así como lo es del teatro, nuestro cine si va a ser observado con lupa, las novelas de televisión no. 

                                  


Cesar Manzano quien también coescribió el guion y es miembro del elenco protagonista trae una historia dividida en sub-historias cuyos personajes de cada una tienen un punto de conexión, entre los máximos exponentes de esta forma narrativa  podemos mencionar a Robert Altman y Quentin Tarantino, por lo tanto es obvio que Manzano se inspiro y tomo prestado la estructura dramática impuesta principalmente por este dúo de celebres directores, ya hay muchas cintas de este tipo pero en Venezuela es la primera que se mete de lleno en este campo, por lo tanto es lógico permitirse hacer algunas comparaciones entre el trabajo de Manzano y sus mentores.   

En la elaboración e interpretación de los seis personajes principales se nota que unos funcionan y otros no, en esta oportunidad el trió femenino es el que no logra dar la talla dejando un poco por fuera a Claudia La Gata.
La evaluación de los personajes principales se puede resumir de esta manera:  

Claudia La Gata (La Actriz): Se convirtió en una grata sorpresa, la modelo demuestra que tiene madera como actriz en su papel de una celebridad que sucumbe ante los excesos de la fama y las drogas, algunos de sus altibajos en la interpretación se deben más a  fallas en la dirección de actores, si se prepara mas La gata puede tener un buen futuro como actriz dramática.

Cesar Manzano (El empresario corrupto): No hay dudas que es un buen actor y le da mucha credibilidad a su personaje además se reserva muchas de las mejores líneas de la película, sobre todo en la escena de su reunión con los banqueros, esta soberbia, lo que no se comprende es que siendo un buen actor no se percato o corrigió las sobreactuaciones notorias de parte del elenco en su trabajo como director.    

Isabella Santodomingo (La Alcaldesa): Es el papel más débil de todo el sexteto protagónico, ya desde el guion su personaje presenta grandes fallas y si para colmo le agregamos la sobreactuación sostenida a lo largo de todo el film por parte de Isabella tenemos un caracter que se hace insoportable y que va en perjuicio de la credibilidad de toda la obra, insólitamente  se le dio un discurso de cierre carente de veracidad interpretativa, ¿No se percato de esto Manzano?

Luis Fernández (El publicista): Luis es un veterano, aquí da la talla, sus dotes histriónicos los ha demostrado muchas veces, el problema de su personaje no viene de el, proviene de un dibujo errático en su construcción desde el guion, su dilema existencial es forzado, la gente a los 40 ya esta clarita de su inclinación sexual ya sea hetero, homo o bisexual, su confusión es valedera si fuese un adolescente o un veinteañero, recordemos que para elaborar el perfil de los personajes hay que hacer algo de investigación psicológica.

Clarissa Sánchez (La esposa insatisfecha): Una de las interpretaciones mas difíciles es la de un ser inseguro y vulnerable, eso tiene que la audiencia asimilarlo de manera correcta, en algunos momentos Clarissa logra algo de introspección en sus emociones, el publico no es tonto y puede ver que la verdad es que lo que sobresale y mas con una cámara fija en la cara en primer plano es que a Clarissa le falta mucho para llegar a la altura del difícil papel que le encomendaron, necesita mas estudio y preparación, al final su personaje se cae en pedazos y no logra ningún tipo de empatía, de nuevo pregunto: ¿No se percato de esto Manzano?

Carlos Camacho (El jugador): Lo mas destacable de Camacho aparte de su buena interpretación es su manejo correcto de la dicción y entonación necesaria para que el personaje tenga credibilidad, transmita y cale, no hay nada peor que ver a un actor recitando un guion, Camacho dice sus líneas muy naturalmente sin acentuar de mas las benditas eses al final de las palabras (esa es la forma en que se habla coloquialmente en Venezuela) de la misma forma que lo hace Cesar Manzano.                               



El guiòn firmado por Cesar Manzano y Sebastian Torres se le concede que es el primero en llevar las historias paralelas al cine nacional y enlazarlo con la idiosincrasia de Venezuela, eso se logra, las cadenas de sucesos y los diálogos tienen un buen ritmo y mantienen la atención de principio a fin, pero es en el perfil de algunos de sus personajes sobre todo los femeninos en donde se encuentra la gran falla estructural del guion y si añadimos la imprecisa dirección o la desacertada escogencia de los actores ya en el proceso de producción es predecible que esto afecte la credibilidad de la obra, al final a nivel argumental todo se queda en buenas intenciones pero dados los defectos en su estructura salimos de la sala con la sensación de que no vimos una película si no una especie de ensayo de la misma, si el espectador no asume lo que ve en pantalla como real y al contrario entra en conciencia de que esta presenciando una película, lo planteado se va por el despeñadero.       
Una vez mas el síndrome telenovelesco se apodera de la cinta pero ya hacia su cierre, si Manzano quería hacer algo a lo Altman, Tarantino o Cassavetes, debe saber que estos nunca ponen por encima la emociones sobre el intelecto (no es que no exista emocionalidad en la obra) y mucho menos caen en un panfleto poético moralista con música sentimentaloide de fondo que rompe con todo el excelente código oscuro del cual venia el film. Espejos comete el pecado de darnos un cierre explicativo, es espantoso subestimar al espectador, el no es idiota, el sabe la critica y la denuncia de todo lo que presencio y al final se le debe dar una brecha para que el juzgue individualmente, no hay que agárralo de la mano y darle un sermón como si de un niño se tratase, si esto se dio por presiones ajenas al director este debe dar la pelea, por que queda en tela de juicio la veracidad y el valor artístico de su obra.

En Espejos también hay cosas muy positivas, lo mas destacable es la dirección de fotografía a cargo de Junior González, la cuidada construcción de cada uno de los encuadres es memorable haciendo que la cinematografía se convierta en la gran protagonista y estrella de la cinta, esta logra inclusive hacer soportable y darle algo de credibilidad a las malas interpretaciones de parte del elenco, se felicita a Cesar Manzano ya que se nota que se afinco junto a González en conseguir un refinado lenguaje visual muy llamativo y que pone en contexto al entorno en donde los personajes se mueven.
Otros reconocimientos a la imponente puesta en escena de Ronald Felice y Fabiola Fernández magistralmente armonizada con los fotogramas así como a la excelente musicalización de Miguel Emmanuelli, lo que hace que Espejos sea Junto a Libertador las dos mejores cintas en la historia nacional con mejor fotografía, diseño de producción y música que he presenciado hasta el momento.

Seguimos esperando y sabemos que llegaría el día en que las cintas Venezolanas se conviertan en referenciales a nivel interpretativo, algo que hasta ahora desde mi perspectiva solo parece manejar Fina Torres, la cual parece saber la importancia de un buen casting, ensayar y ensayar con los actores antes de entrar en filmación y ser minucioso y exigente a la hora de dirigir.                              



VALORACION: 6 / 10


alf.cols@gmail.com / @cinealfred