El matemático e ingeniero
devenido a director-actor Shane Carruth nos presenta su segundo largometraje
desde su opera prima PRIMER en el 2004, Carruth con tan solo dos films y de
larga pausa entre ellos es una de las figuras mas vanguardistas del cine
independiente estadounidense.
Upstream Colour es una obra de ciencia
ficción pero con una gran inclinación hacia lo dramático y explora de forma muy
intimista la postura existencial de sus interpretes en torno a los extraños
acontecimientos a los que son expuestos, de esta manera Carruth quien también protagoniza
y escribió la música de la película traza
una línea muy delgada entre el Sci-fi y el drama y presenta algo difícil de
catalogar convirtiendo lo fantástico en un puente para afincarse en el
potencial humano de su no convencional guiòn.
Carruth plantea una nueva forma
de dominación mental a través de un gusano proveniente del cerdo, el cual es
cultivado por un enigmático granjero que asociado a otro que seria el
ejecutor implantan este en la mente de
sus victimas las cuales quedan a su merced y en obediencia total entregan todos
sus bienes monetarios sin la mas mínima resistencia, luego mediante un extraño método
el granjero extrae los gusanos ya que las vidas de los perpetrados correrían peligro,
a posterior quedan en estado de amnesia con respecto a lo sucedido.
Carruth interpreta a Jeff y Amy Seimetz a Kris, dos de las victimas que aparentemente
por azares del destino se encuentran y emprenden una relación que se complica
por el trauma que yace en el inconsciente de ambos y que los lleva a la búsqueda
de respuestas. La forma en como Carruth plantea la historia pudiera desorientar
a algunos espectadores acostumbrados al cine promedio, en ocasiones los diálogos
de la pareja no corresponden con las imágenes que vemos, lo que no quiere decir
que este recurso carezca de significado, además de estar presente una especie
de aura surrealista que esta mas relacionada con lo que ocurre en la psiquis de
los caracteres.
A pesar de parecer una obra
intelectual, Carruth se asegura que todas las piezas encajen hacia el cierre para
una audiencia que solo se le pide que preste atención, dejándole reflexionar no
en lo fantástico, si no en las conexiones que implican a todo ser viviente.
VALORACION: 9 / 10
alf.cols@gmail.com / Twitter: @cinealfred
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